martes, 31 de enero de 2017

SEÑALES

Esa gota en el laurel,
su borde,
la hoja,
el temblor,
cuando terminó la lluvia,
y la luz
en el apenas,
al caer,
ya muda,
¿será la última señal?
EXCRITURA DE THOMAS BENHARD

Todo lo que él veía y tocaba era enfermizo.
Un mundo solo en agonía, triste,
incluso cuando parecía estar sano.
Creía que la vida estaba en la cabeza,
y afuera no había nada. O peor.
Pero todo, en el fondo, también era distinto;
y hacerse comprender, imposible.
¿Por qué que sacrificarse a la comedia,
a una actuación exterior para vivir?
Nuestra vida, decía él, no es naturaleza,
no es para nosotros más que una molestia.
Si al menos existiera la comunicación,
tal vez habría alguna esperanza...
Enfermo, un absurdo triste, así era el mundo.
Además, el ser humano no era capaz,
ni siquiera un instante, de estar con el otro,
salvo cuando éste ya había muerto
y se encontraba verdaderamente dentro de él.

FUNDAMENTOS DE LA EXCRITURA

Es así; nunca es eso
lo que en verdad se quiere escribir.

Aunque se insista,
y se corrija y se borre y se olvide.

Siempre hay algo,
ese fondo sin fondo de la palabra.

Una piedra,
tan sencilla que no tiene nombre.

Cualquier arbolito,
apenas se vuelve a mirar ya es otro.

Cerca o lejos,
allí no es allí y tampoco un lugar.

Para colmo,
adentro y alrededor todo el silencio.

Nunca, es así;
y por eso, solo por eso, ¡ay!,se escribe.
EXCRITURA DE IVÁN ILICH

Recién ahora soy
el que nunca fui: Iván Ilich.

Desesperado grité,
pero ya era tarde y jamás.

No conocí la vida,
no me atreví a los misterios.

Pero al fin el aire
me revela mi olor putrefacto.

Sé que ellos disimulan,
casi nadie me pueda soportar.

Claro que en su situación,
lo sé, habría hecho lo mismo.

En verdad, la apariencia
nunca engaña: apenas es falsa.

Inútiles, todas las preguntas;
aunque tal vez con la muerte...

Igual ahora entiendo:
sé no puede ser, tan solo es.

FURIA DEL SPLEEN

Los despiadados cohetes de Baudelaire,
rabiosos, pronto estallarán en el corazón de París.

Igual, ya los paseantes están muertos;
o apenas miran, ciegos, las luminosas vidrieras.

Todas demasiado ordenadas, limpitas,
sin el engaño infantil de las viejas mercancías.

Además, al cruzar las calles, cualquiera,
¿quién sueña con ese instante fatal de la belleza?

Solo, un ratito, muy de vez en cuando,
se puede reconoce ese miedo vital: un atentado.

O sentir un poco de viciosa nostalgia
por aquellos viejos y las tantas y tantas putas.

Hasta el spleen resulta aburrido,
dos horas por día, puntual, pasa por el gimnasio.

En verdad, París es apenas un nombre,
una herida falsa que olvida mostrar su sangre.

Claro que a él nunca le importó la ciudad,
pero ahora no quiere que nadie se asome a sus poemas.
EXCRITURA DEL DANTE

Son demasiados, sin gestos, mudos,
y corren, en círculos, y corren
detrás de una bandera, cualquiera.

Alejados de alabanzas y vituperios,
nunca fieles ni tampoco rebeldes,
solo vivieron para sí, hasta la nada.

¿Será un escena de otro mundo?
Pero al mirar distraído el acá,
la imagen deja de ser una imagen.

Jamás se podrá detener su castigo
ni siquiera los acepta el Diablo:
peor que el infierno es la indolencia.
EXCRITURA DE LUCIO MANSILLA

Toda la creación en las estrellas
y el desierto de tanto silencio;
apenas un relincho lejano,
algún graznido en la laguna.
Cerca del fogón, pienso
o trato -inútil- de dormir.
Acá, entre estos indios,
recién veo a la humanidad.
Hay otras voces en el fuego
que conocen las palabras,
la redención de la miseria
junto al estar oscuro del cuerpo.
Así duele no ser esta tierra,
cuando somos unos pobres diablos.
MINIMAL GÓTICO

Claro que apenas es otro de los tantos finales,
esa diaria rutina que termina en la noche.

En el desorden de la cocina, ahí,
la indiferencia amenaza desde cada cosa:

vasos, cubiertos, platos, ollas,
restos de algunas comida y otras ausencias;

mudas, en tanta suciedad ajena,
no esperan el milagro de la vida o una voz.

Por supuesto que no tiene sentido,
aunque en las sombras el miedo crece, real.

Todas esas tonterías góticas:
fantasmas, las formas de lo otro en este mundo.

Ni siquiera puede salir al patio,
la soledad no resiste a esas ropas colgadas.

Perdido el reflejo mira a la ventana,
sin palabras, la única salvación es apagar la luz.

lunes, 30 de enero de 2017

EXCRITURA DE ESPERANDO A GODOT

De lejos,
¡cómo evitarlo!, a cada rato Godot los espía.

Esos gestos,
casi rotos, le despiertan cierta curiosidad.

Inútiles,
saben que así esperarán más años y más siglos.

A veces,
ante la esperanza no puede contener la risa.

Entonces se aleja,
y mira otra vez el cielo para encontrar la nada.
DRONES DE LA EXCRITURA

En mi cabeza sobrevuela un drone, casi invisible, apenas un zumbido lejano que se confunde ante los gritos mudos de la sangre y el olvido.

Pero es tan delicado que no molesta, y a cada instante murmura que me ama y me protege de los animales libres y feroces.

Nunca puedo saber si es real, lo mismo que esos cuentos de brujas malas que aterrorizaban los sueños de mi infancia.

A veces casi se detiene, o acaso duda, como si entre las formas de las nubes escuchara la súplica patética del último ángel.

Pero yo no me distraigo y hago mi trabajo, solo repito a las palabras de los muertos: mis únicos pensamientos son los daños colaterales.
EXCRITURA DE ROBERT FROST


Después de tantos poemas felices
entre árboles, hojas secas,
senderos sin rumbo por el bosque:
mis ojos ya no ven...luz.
Aunque sigo a mis huellas,
no me llegan las palabras;
mis floridas musas,
ay, solo son el olvido.
tan vacío siento mi cuerpo.
Quiero pensar en otro,
acaso en el ruiseñor de Keats.
Pero no hay un pájaro que cante,
y si lo hay, quizás que sea mi pérdida.
EXCRITURA DE MARCIAL

Tantos epigramas, pijas, culos
y demasiado ingenio.
Todos tus versos, perfectos:
¡cuánta soledad pobre Marcial!
EXCRITURA DE MARIANNE MORE

Quizás la coraza parece excesiva,
pero si lo molestan,
rápido, se esconde detrás de sus escamas.

Siempre en el silencio, cauteloso,
su movimiento es exactitud.
Y de nada y nunca, no conoce el miedo.

Un alcaucil con cabeza y patas,
y si se lo observa bien:
la réplica de un Leonardo Da Vinci.

Claro que no siempre están solos,
a veces se ablandan
y uno de sus hijitos se les trepa a la cola.

El pangolín también es la gracia,
una fábula aun viva.
Al verlo, tan tranquilo, se equilibra mi alma.
EXCRITURA DE RAYUELA

A pesar de tanto jazz, el alcohol,
la tonta sabiduría libresca,
Oliveira anda en el estar perdido, siempre.

Ni siquiera esos jueguitos,
graciosos y más absurdos...
Nada evita buscar lo que no se encuentra.

No le importa el allá o el acá,
y cada vez más solo
el tiempo lo deshace con cada cigarrillo.

¡Pobre Oliveira!, ¿quién
un mal día limpio las veredas?;
en el mundo ya no quedan más rayuelas.

Además, ya no respira
el bebito rosado de la magia
o el pañuelo del dolor se olvido el llanto.

Entonces ni sirve perderse,
silbar, leer, delirar, vivir;
inventa un muro y grita su nombre con hache.

Ahora su destino es un piolín,
o miles, invisibles, enredados, finales:
el amor puro y desesperado de todos los locos.
EXCRITURA DE PENTADIO

Ante ese hilito tan delgado
que se corta en la sombra,
solo nos queda el consuelo del mar.

Desde la playa, los pies
desnudos y hundidos
en la frescura infinita de la arena.

O escarbar en su orilla,
distraído, sin apuro,
hasta que una almeja abra la mano.

Si se descubre un caracol,
apenas acercar el oído
para viajar, inmóvil, en el misterio.

Ya se sabe, tan delgado...
el engaño es una ola
y el sueño de la brisa en la espuma.

domingo, 29 de enero de 2017

EXCRITURA DE THEODORE STURGEON

Solo llantos, solo ruidos.
Siempre la casa y ese muro,
demasiado hermosa la primavera.
El pecho desgarra latidos;
otro dolor, de todos.
Eres un monstruo, perfecto,
ya lo sabés,
y la piedad cubre tu piel
y el mundo es una pesadilla.
Solo en vos, única,
las falsas ilusiones de la salvación.
Pero nadie podría entender,
apenas son humanos;
así que huye, olvida tus sueños.
Si intentas algo, te destruirás.
EXCRITURA DE SUI GENERIS

Pronto, apenas en un par de semanas,
ya cumplirá los inevitables sesenta.
Aunque intenta pensar, nada;
tan rápido pasa esta vida.
Pero no se queja, lo acepta,
solo le molestan tantos consejos,
que el alcohol, la sal, el cigarrillo;
como si él no lo supiera...
¿quién es ese viejo en el espejo?
Por suerte, aun le queda un recurso,
cuando está tranquilo, solo, lejos,
vuelve a escuchar a Sui Generis.
Así de simple, y apenas tiene veinte años.

EXCRITURA DE LA MUERTE

Inútil, ella todavía no quiere ser mi amiga.
A veces lo entiendo; otras, no.
Sin embargo, jamás la maltraté,
ni siquiera con algún pensamiento.
Por el contrario -y no es una metáfora-,
al ver las lentas caídas del sol
o el mar tan profundo y tan azul,
hasta siento deseos de su compañía.
Antes de dormir, al cerrar los ojos...
a pesar del esfuerzo ningún mensaje.
Tal vez sea eso, mi insistencia,
la gratuita curiosidad ante el misterio.
Después de todo, en la eternidad,
solo ella estará en la ausencia de mi sombra.

EXCRITURA DE JOHN CAGE

Aquí estoy, y quisiera irme a cualquier momento.
Lástima que ahora hay silencio, muy lejos,
y un vaso de leche fresca sobre la mesa;
lo cual no impide intentar una salida
o quedarme, ¿acaso tiene importancia?
Así como el azúcar adiestra a los caballos
nos preparan para hacer lo que somos.
Nada más -o menos- es lo que aprendí alguna vez.
Ustedes podrán llamar a estas frases
una conferencia acerca de la nada,
el simple amor abandonado de un cachorrito;
pero cada vez más es ningún lugar,
decir aquí solo es una falsa abstracción, inútil.
Yo confieso que apenas soy un intervalo,
En verdad no sé, pero a veces creo algo: ruidos o notas.
EXCRITURA (ANTICIPADA) DE NIETZSCHE POR EL DOCTOR FRANKENSTEIN


"No seais cobardes: sed hombres, o mejor, superhombres.
Permaneced fieles a tus más arriesgadas pasiones,
aguantad los contratiempos con la dureza de las rocas,
como héroes que combatieron con valor, sin piedad,
que ignoran lo que sea dar la espalda al enemigo.
Al final, solo encontrareis la eternidad redendora del hielo."
EXCRITURA DE UNA EXCRITURA DE LEPERA

Ese descuido fatal de vos sin vos,
por los obvios arrabales
o lejanísimas constelaciones.

Un gorrión volando en recuerdos,
entre tangos y piringundines
tan cerca de mi última sombra.

Ahora solo existe la pobre pena
con sus estrellas mudas
para ese volver ya perdido,

Pero todavía crecen alguna flores,
colores abiertos en el aire,
y la mujer sin ninguna metáfora.
.
EXCRITURA DE HÖLDERIN Y JUANELE

El sauce ya inclina su leve sombra.
Brilla, el césped con el rocío
y lejos, más allá, se ven las nubes rosadas.

Un sentimiento soñado por el sí
a la deriva de las azucenas,
casi perdido en los ojos de los narcisos.

El tímido oleaje golpea a la orilla
con un aire silencioso y cortés,
y el poeta espera la llegada de la mañana.

Claro que podría ser Hölderin o Juanele,
cualquiera; no importa si el estar
apenas anhela su disolución en la Presencia.

sábado, 28 de enero de 2017

EXCRITURA DE ALIOCHA, DE DOSTOIEVSKY

Solo peregrinarás hasta el final del último día.
Habrás de soportar los peores sufrimientos:
el hambre, la sed, humillaciones, la soledad.
Pero es tu misión, buscar la felicidad en el dolor.
Los milagros son reales, y nacen en la Fe.
Así será tu lucha, la lucha, para saber amar;
nadie, nunca, escapa al horror de la sangre.
No temas, Aliocha, verás sonreír a los niños.
Anda, todos somos culpables de todo y por todos.
EXCRITURAS  DE OTRO MAR

¿Ese mar casi inventado por Conrad.
el fantasma fatal del naufrágio
que agita espuma de vida,
será, al fin, el anticipo
o el mismo recurso:
la fórmula Stanislaw Lem,
que insinúa nuestro final
-¡cuidado, no hagan olas!-,
una de mosqueteros del siglo XXII
en la evolución del universo?

Ante la ausencia de respuesta,
con un poco de resignación,
el profesor olvida la pregunta,
contempla sus alrededores,
hunde la sombrilla en la arena
pero antes descubre el error:
solo era otra tonta pregunta retórica,
un artificio involuntario
ante el mar y su amenaza
Ahora sus ojos se olvidan en el horizonte..
EXCRITURA DE RAY BRADBURY

Nadie se anima a decirlo, pero todos lo saben, las señales son claras: esa noche es la última, el fin del mundo.
Mientras comparten una vez más la cena, ellos aceptan la fatalidad; ya han vivido... tan simple.
Ellos, su viejo y único amor, ahora se miran en silencio; y después, como siempre, se acuestan juntos en su cama.
EXCRITURA DE JORGE LEÓNIDAS ESCUDERO

Yo vengo resucitado y entonces actúo,
quizás por falta del ver
me dedico a escarbar la línea del horizonte.

De cada fracaso, tantos,
vuelvo a asomar la cabeza y sigo,
no me importa que no sirva, todavía veo.

Sé que para muchos
apenas soy un loco o un sonso;
pero así es mi estar, como cualquier piedra.

A veces hasta me pellizco
para mantenerme más despierto,
y si en el más allá no hay nada, yo resucito.
UNA EXCRITURA DE TEMPESTADES DE ACERO

Ernst Jünger, ese lúcido pensador,
tan preocupado por el hombre
y el destino de toda la humanidad;
un día decidió ir a la guerra,
Jünger deseaba ser un guerrero,
un héroe, y lo fue: qué boludo, ¿no?

PALMERAS REALES

Tengo miedo, seguro que una de estas noches
en algún sueño, descuidado, aparecen las palmeras.
Hace ya varios años que las veo crecer,
flacas y tristes en el Camino de Cintura
o en Ciudad Evita, tan desamparadas, al sol.
También acá nomás, en la placita de mi barrio.
Pero todavía ninguna es suficientemente real.
Aunque a veces, de regreso, en el colectivo,
con viento en los ojos se escapan por la ventanilla
para alcanzar hasta el más cielo, otro
o el mismo, ya cansado de andar por el piso.
Por suerte, regreso cansado y me baño y comer
y ya ni se me ocurre pensar en ellas.
Igual, por las dudas, enciendo la tele para poder dormir.
No quiero el vértigo de esas miradas, tengo miedo.

EXCRITURA DE MAROSA DI GIORGIO

Todo es milagro,
apenas si me atrevo a mirar.
Inmóvil,
el gladiolo es un hada,
blanco,
como nieve o luna.
Lo sé,
ninguna imagen sirve, inútil.
Pero ocurre,
no se trata de ensueño.

A veces,
hasta me abre esa puerta,
una luz,
pero no hay ventanas
ni paredes,
apenas una mesa y un plato:
la manzana,
tan roja como la sangre,
la muerdo,
el encanto llena mi deseo
y así puedo respirar.

viernes, 27 de enero de 2017

EXCRITURA DEL TÍTULO DE UN CAPÍTULO DE EL QUIJOTE


Aquí se cuenta el secreto de las razones que pasó Sancho Panza con su señor Don Quijote al inventar un encuentro inexistente con Dulcinea que, luego de colmar las ansias de su señor, también enamoró al tonto escudero y a todos los que leen este capítulo y comprueban, irremediablemente, la verdad inalcanzable de la Belleza.
EXCRITURA DE CONRAD

Aquel barco, ¡mi barco!, al fin me pertenecía
más que ninguna otra cosa en el mundo.
Su llamado había venido del cielo,
la pasión súbita, intensa, en mis venas:
ser su Capitán, ser el mando del mar.
Claro que la ruta sería muy larga;
igual que el recorrido de los deseos.
Pero todo lo demás resultaba indiferente,
y aquel vacío en la vida, de pronto,
ya había perdido su razón, su poder nefasto.
Al poner el pie sobre su puente...
nada igualó la plenitud de ese momento.
Una penetrante intimidad en mí, ajena,
oscura, tan soberana: se es o no se es marino.

A ONETTI

Ya sé que era inútil, que solamente él,
pero la esperanza es lo último...
Yo creí que era fácil
y no pude, no lo resistí;
aunque me llevé muchos libros,
todos los policiales.
Apenas poco más de un día,
lejos de cualquier sol;
demasiado para mi desesperación.
Hasta echarse en la cama,
olvidarse;
ni siquiera eso es posible en este mundo.

EXCRITURA DEL DOLOR

Ya le duele mucho la cabeza
o aun más adentro.
La ventana tan triste
y también el sol.
Algo está muy lejos,
pero la mirada es ciega.
Todavía no tiene sentido,
tampoco ese árbol,
ninguna palabra.
Duele, un pájaro grita su alma.
EXCRITURA DE GEORGES BRASSENS

Nadie me entiende, ya soy un viejo.

Alguno creerá que estoy enfermo
y tal vez es cierto,
solo sé que así soy feliz.

Aunque jamás escuche su voz,
ni vayamos al cine,
al menos vivo tranquilo.

No es fácil reemplazar un cadáver,
tampoco verse al espejo,
a veces esa cara es extraña.

Pero cuando acuesto a la muñeca,
ella cierra los ojos.
Y también dice mamá.

A mí me gustan sus labios rojos,
su pollera corta
y sus pies desnudos.

Siempre dormimos muy abrazados,
no le importa mi aliento.
Aun vivo, contento, para ella.

Para no suicidarme, me hice pequeñito.
EXCRITURA DE JOHN DONNE

¿Perdonarás los pecados que cometí, tantos?
Si lo haces,
no servirá de nada.
Te aviso, Señor,
que ni la muerte,
nada, podrá detener mis desesperadas pasiones.
EXCRITURA DE LA ESCASEZ

Ya no se consiguen esos loquitos a la Cocteau,
ni siquiera las imitaciones de plastico,
descartables, made in China.
Según parece, no se fabrican más;
total, cualquiera se intoxica, se mata
y hace su propia película,
a dos mangos las venden en la feria.
Pero peor es la poesía sin consuelo,
con la falta de lo sabido
y la certeza amarga del mate frío.
Así no hay sentido que valga,
si ni siquiera sirve empezar otra vez.
Sin embargo, acá, durante toda la noche,
solo como un moñito de Troilo,
hasta que escribo sin querer la palabra sol.
Lástima que tampoco sirve,
nublado el cielo, y hay que salir a comprar el pan.

jueves, 26 de enero de 2017

PARTITURA DE PERROS

Esta mañana mi perro Pipo,
echado junto a mis pies,
se copó con Philip Glass.

Al volar las cuerdas,
él apenas gruñía,
y al aparecer los metales
ya soltaba sus aullidos.

Pero su mayor placer
-pleno de silencio-,
eran los coros femeninos,
solo cerraba los ojos.

Nunca entendí la música;
pero por suerte, ahora,
Pipo me enseña su misterio.
EXCRITURA DE QUASIMODO

En el final de la tarde
ya se hunden, lejanas, las campanas vivas.

Ni digas ninguna palabra,
la hora solo pertenece al aire y al bosque.

Siempre es verde la deriva,
y sigue las voces de los ríos y las rocas.

Ya caídas en la noche,
las casas esperan el sueño de las montañas.
SENTIDO DEL DESIERTO

Apenas un hombre y alrededor, todo lo demás, el desierto. Ningún gesto en su rostro, ningún asombro, pena o desesperación.
¿Señor, qué es ese hombre?
Ahora mira el horizonte vacío, sin cielos, sobre la única piedra deja que el viento, lentamente, lo envuelva en la arena.
¿Acaso soy yo ese hombre?
Solo el silencio raspa la garganta, quema, y el grito. Pero nadie escucha, no hay respuestas; ya se ahoga, hunde, la tentación de la nada.
EXCRITURA DE VINICIUS DE MORAES

Vamos subiendo las escaleras hasta el cielo.

En las sábanas
esa sombra de las altas arboledas.
En el aire
las formas luminosas sin rumbo

Las ropas caen en el encuentro del deseo.

Ya siento
el misterioso perfume de la carne.
Pero lo sé...
solo es lo que no puede tener amor.

¡Amantes, derramen su alma en la eternidad!

miércoles, 25 de enero de 2017

EXCRITURA DE HÖLDERIN

¿Quién piensa hondo,
ama a lo más vivo?
UNA EXCRITURA SEMINAL

En el reloj del adentro
ya no queda ni siquiera un después.
Solo esas frases rotas
y ese punto negro, enorme
o un pozo.

Apenas se soporta
la tierra podrida en la raíz del alma.
Pero, nadie lo sabe,
así puede ser el tiempo de la vida
y nacer una flor.
JAIKUX

Ese tomate se cayó de la planta, solito, abandonado y se pudre... Ya no lo quiero ver.
EXCRITURA DE LA ZONA GRIS


Él y su poco pellejo
solo los veían jugar, ahí, en la tierra del campo.

Nunca lo imaginó,
pero parecía normal, lo más humano.

Y corrían, como chicos,
y hasta festejaban con abrazos los goles.

A veces se distraía,
no distinguía entre las víctimas y los victimarios.

Sin entender, de pronto,
él comprendió que ese partido era eterno.

Ya no quiso mirar,
alzó los ojos: la ausencia del cielo era tan gris.




EXCRITURA DE MARTÍN GAMBAROTTA

En la damajuana verde y vacía,
ya silba el viento.
Por la ventana un relámpago,
apenas un grito
en el peso de las nubes.
Ahora llega la lluvia,
pero igual no hay más ideas;
y la reposera,
tan sola, abandonada en el jardín.

UNA MÁSCARA DE LA EXCRITURA

Hoy solamente sufro.
Si me llamase César Vallejo,
no cambiaría nada.
Me duelo sin explicaciones,
desde el más abajo
hasta el último piolín.
Y aunque estuviera muerto,
también sería igual:
solo palabras podridas.
Es así, suceda lo que suceda,
ningún viento
ni espuma,
ni siquiera un resbalón.
Sin nombrar los huesos,
la sombra o ese carrousel.
Tampoco me asombra,
más me preocupa el arroz,
que no se pase...
Hoy..., ¿solamente hoy?
EXCRITURA PUNK

De a poco,
también hay que recuperar el odio.
Empezar con el más elemental:
a Dios,
ese es el odio del alma.
Después a los seres humanos,
sin excepciones,
ese es el odio de la razón.
Y finalmente a sí mismo,
con el alma plena,
al menos por un rato.
Recién entonces se aprende a odiar,
a cualquiera,
como debe ser.

martes, 24 de enero de 2017

EXCRITURAS DE ROQUE DALTON

I

Cada día menos cosas,
un par de camisas remendadas,
casi limpias,
esa cama y el roperito,
apenas, como la única poesía.

II

Todavía pocos, muy pocos,
casi nadie comprende
que la poesía
no son las palabras,
apenas escuchar los latidos.

III

Me amanece la nueva vida,
contra la melancolía,
la desesperación.
Mejor descubrir y vibrar,
dejar en libetad a las palabras.
EXCRITURA DE LA LOCA DE ONETTI

Cagado, el vestido de novia, ella corre entre los árboles del parque y la luna. Sabemos que no está loca, y que apenas espera esa felicidad, como cualquiera, mientras llora como la herida de una perra sarnosa. Pero otro es el engaño, y quizás solo sus ojos rojos conocen el secreto.
Ya no importa qué pasó -nunca importa-, lo sabemos, escapamos de las verdades. Ni lástima ni piedad, la burla disimulada que se esconde en la peor envidia: el aburrimiento vacío. Esas inevitables, sucias promesas, y las crueles ilusiones de los juramentos entretienen a los chismosos, todos.
A veces,algunas noches, también se oscurece la casa, y poco a poco el terror se mira ríe en las ventanas de Santa María. Ella con su vestido de novia, y esa mierda, no deja que vivamos en paz, sin pasión, sin la única razón en esta vida: el deseo más absoluto del único amor.
A mi me da vergüenza escribir por tercera vez esta historia sin encontrarle un final distinto, conmoverme de una historia que no me pertenece, ajena y lejana. Aunque por momentos, no sé, casi puedo verla, y es hermosa, un destino brutal que nos amenaza a cada instante, implacable. Por suerte, ella también será nuestro castigo.

EXCRITURA DE KAFKA

Josefina no canta el tango,
chilla, y su armonía es la única.

De lejos, casi se entiende,
pero su arte siempre es otro.

O ninguno, pero todos
amamos su desafío desafinado.

En verdad, su última voz,
a veces nos trae ese silencio.

La niñez sin ninguna edad,
inconclusa, más allá de la ley.

Pero vivir es imposible
sin ella, nuestro destino es triste.
A SILVINA OCAMPO

Entre las criadas de la casa,
en un rincón, escondida, aprendía el placer del pecado.

Después se escapaba,
necesitaba compartir esos secretos prohibidos.

Ella prefería a ese chico,
el de los pelos y los pies más sucios.

A pesar de los retos
y las clases de francés, callaba y era feliz.

Para conformar a su linaje,
simulaba escribía versos, ingenuos, tan aburridos.

O se miraba en el espejo,
ajena, extraña, delicada y monstruosa.

A veces, desde la terraza,
apenas se asomaba y escupía a su hermana.

Pero al llegar la noche
su fantasía no podía dormir, crecía y liberaba sus manos.
EXCRITURA DE HUGO PADELETTI

Siempre el movimiento es ubicuo;
el naufragio, la experiencia.

Espejos de una misma forma
sin forma, el yo.

Ese vórtice de los cuerpos,
su viaje sin retorno.

Por los límites de la eternidad,
vacíos en el vacío.

Pero justo en el centro, tanta plenitud,
la verdad de un diamante.

lunes, 23 de enero de 2017

EXCRITURA DE PROUST

Cuando duermo con los ojos aun abiertos,
me nace, perfecta, una mujer.

No de mis costillas,
real, un sueño adentro del sueño.

Yo ya conozco la trama,
ella me deja ir hasta su piel.

Y mi cuerpo es ella,
la imposible unidad del amor

Así,encuentra mi vida,
sin palabras, a la nunca felicidad,

Pero después despierto...
será por eso que no puedo dejar de escribir

EXCRITURA DE HAROLDO CONTI

También el álamo,
a veces, le contaba sus historias.

Al caer la tarde,
la brisa juntaba las palabras.

Lejos de este mundo,
como si flotara en el cielo.

Solo algunos pichones
chillaban, no podían volar.

También el álamo,
a veces, lo confundía con su sombra.
EXCRITURA DE FRANCISCO MADARIAGA

Alguien lejano
me esconde y me devuelve.

El cielo, irreal,
no asombra el sabor de la manzana.

Los palmares de sol,
sus ondulaciones soñadas de fuego.

Algún jaguar,
duerme su hambre en la siesta.

Y canta el zorzal,
invisible, entre sombras de ramas.

Alguien lejano,
un río, los ojos de un niño.
EXCRITURA DE JOAO CABRAL DE MELO NETO

Dejate, tendido, sembrar,
ya no quedan más esas fuerzas en vos.

Tu mano no es simiente,
ahora es apenas el temblor del grano.

No eres ni un tallo
o la alta y débil línea de una caña.

Olvida la ilusión del cuerpo,
dejate sembrar en el gran surco, la vida.
AZABACHE DE LAS DUDAS

A veces, o muchas, da tanta bronca.
Ese balbuceo inútil, sin palabras,
que solo le hablan a la muerte.
Y molesta, vueltas y más vueltas,
mosquitos en la oreja del alma.
Pero también ahí, los alrededores
con sus árboles humanos de sombra.
O la brisa, y la ventana abierta
para dudar del color del cielo...
Si hasta los borrachos en el barcito
todavía sonríen ante las estrellas.
Te obsesiona, se sabe, esa música,
los puros azabaches de otro silencio.
Igual, por el momento, gana esta vida.
EXCRITURA DE SPINETTA

Suave brisa,
solo una palabra.

En esta orilla, siempre,
miles y miles de años.

Suave junco,
solo una palabra.

Más allá del horizonte,
en el sol de los ojos.

Suave cielo,
dame una palabra.

Después de cruzar el mar,
todavía espero tu voz.
EXCRITURA DE SAMUEL BECKETT


Siempre los noes pasan
y se pierden,
como un pájaro
mudo y ciego.
Ya no sirve
el truco de la referencia,
la espera
o la tontera del yo.
Tampoco esta ventana,
la literatura.
Y esta cabeza,
este cuerpo,
hasta los pies,
le dicen que sí a la nada.

APOCALIPSIS MINIMALISTA

En la mesa los pañuelos de papel,
el destapador y un corcho,
los controles remotos, sus botones,
ese cenicero, y tantas cenizas;
en la ventana, ya abierta,
el afuera y los pájaros falsos;
insoportable, sobre el muro,
la mueca indiferente del sol.
Pero el cielo raso aplasta, aplasta...
y también estas paredes, mudas.
Ningún alerta, apenas ese terror,
un bollito apretado de papel, un puño.
EXCRITURA DE FAVIO

Imaginate
a lo más chiquito,
el culo de una lombriz
o un átomo.

Hace un esfuerzo,
¿acaso ellos sospechan
la gran inmensidad?
Tal vez, sí.

EXCRITURA DE LEOPOLDO CASTILLA

Los muertos viven en las casas,
inofensivos.
No festejan al sol,
y respiran con las lloviznas.
A veces gritan,
ante la unión de los cuerpos.
O se duermen, aburridos,
detrás de las magnolias.
Ningún paraíso:
ellos apenas espían a la felicidad.
EXCRITURA DE OCTAVIO PAZ


Entre el irse y el quedarse,
esa opacidad.
El mundo, quietito,
su magia
sus tantos años,
las sombras en la sangre.
Y estas palabras,
sus voces ausentes;
todo lejano,
intocable y elusivo.
Yo quiero cantar,
solo ser la luz de una mirada.

domingo, 22 de enero de 2017

EXCRITURA DE THOMAS BAYLE ALDRICH


El cuentito es al revés:
ella vive
en un mundo superpoblado,
y nunca,
nadie golpeó a su puerta.
EXCRITURA DE SANTA TERESA

No sé de dónde ni cómo,
aunque nadie lo crea
ni lo entienda,
yo. al fin, lo vi:
un sapo inmenso como la noche.

Claro que era imposible
en el desierto;
pero ahí, tan real,
al borde de mis manos:
un sapo, su única mirada.

Hasta de esa forma,
sencilla y piadosa,
así al fin me revelaste,
-a mí, la peor-,
tan cercana, inefable, Tu Presencia.


EXCRITURA DE CHARLY

Recién te vi entre las luces,
tu alma toda azul.

Las alucinaciones son un bendición,
un mundo íntimo, real.

Sentada en el aire, te vi, única,
y me siento bien.

Además escuché esa música;
igual no me puso triste.

No sé si sonreías, pero es la verdad:
te vi entre las luces.
EXCRITURA DE GIRONDO

Quizás solo el nonato,
el no.

Ni deo,
ni una idea.

Sin sexo,
ninguna órbita.

Ni siquiera
un cero, ese polvo.

Pero vivo,
más purísimo.

El simple no sin nada,
todo.
CASI UNA EXCRITURA DE LA ODISEA

Cerrado el sagradísimo quiosco de la esquina,
también el de la vuelta;
no queda otra que ir hasta la Estación o no fumar.

Claro que la otra Odisea es mucho más divertida;
acá, ningún monstruo en las calles,
todavía duermen las sirenas sus engaños de ayer.

Por la vereda rota de la sombra, casi derrotado,
como después de una larga guerra,
y ni siquiera ganas de volver, ¿a dónde?

Esas pocas diez cuadras, pocas e interminables,
suelen esconder otros peligros,
o ponerse a pensar y dolerse en las preguntas.

Pero al fin, después de la soledad, los semáforos,
bancarse fastidio del viento,
las pisadas cruzan decididas a la ruta.

Hasta se siente satisfecho, un héroe, por el esfuerzo
mientras paga y se despide, apurado.
Ah, esa primera pitada, y así puede terminar otro día.

UNA VARIANTE DE LA ZONA GRIS

Todo (o casi) están más o menos clarito,
por lo menos lo básico.

El famoso monólogo de Hamlet,
apenas es otro lugar común.

Hasta el peor despistado, a veces,
no puede evitar el gran cagazo.

Después cada uno decide, o no,
¡quién se anima a decir que está seguro?

Pero siempre, ahí, esta esa sombra,
una mueca muda que nos recuerda lo oscuro.
UNA EXCRITURA DE LOS GALGOS DE SARA GALLARDO

Jamás los pude ver, ni siquiera en una foto;
pero a veces pienso que son la única belleza, la más sencilla.

No lo entiendo, sin lógica o todo es al revés;
aunque la sensación aparece en cualquier momento, ahora.

Será que las tonteras humanas poco importan:
los amores, los odios, traiciones, memorias encerradas y falsas.

Por suerte, creo haberlos visto en algún sueño;
claro que corrían, apenas reales, hasta perderse en tus ojos.

También al salir sin ningún destino, solo,
para dar vueltas y vueltas sin encontrar ningún centro.

Seguro que la explicación no tiene explicación,
apenas el placer de entrar a esa novela y no querer salir.

Pero otra vez ha llegado la hora de la luna
-vuelven sus fantasmas-, y con tus manos los acaricio...

.Ni se me ocurre volver a releer el libro, inútil,
 sé que la verdad no está en esas páginas, ya  murieron los galgos.
LAS DIFICULTADES DEL VERANO

Apenas a mi hombro -por suerte- le llega el sol.
Me corrí, ahora ya es sombra.

Los brazos del laurel son invencibles,
no los vence ninguna luz.

Y saben bien los mates así, casi fríos..
tanto calor es la muerte.

En verdad, ese hombro no existió jamás; ni siquiera,
el sol y la sombra, un poco de nada.
EXCRITURA DEL REY MIDAS EN AA


Falta menos de una hora para ir, ahí la mesa.
Quedaron dos botellas de vino tinto,
una casi llena.

Todavía no sabe qué hacer, ni lo piensa,
y empiezan a molestar o doler;
y ya están  abiertas.

Pero faltaba poco para llegar a las 24 horas,
no irse otra vez a la mierda,
olvidarse de todo.

No han cambiado los alrededores, nada,
ni esas paredes,
los objetos mudos del comedor.

Ahora prefiere no imaginar a la otro mesa,
ninguna voz, y la suya
menos que menos.

Al fin levanta una de las botellas y sonríe,
la mira sin mirar,
no puede comprender .

Claro que un par de tragos traen la vergüenza,
pero ya pasó la hora...
Así se acaban todos los problemas.
EXCRITURA DE GELMAN


Hizo el intento inútil de olvidar.
No pensó en Borges,
¡lo olvidó!

Tampoco cayó en otro,
ninguno, ni siquiera sus árboles.
Listo para irse, rajar.

Prendió un cigarrillo,
no reparó
en la figura del humo en el aire.

Pero, ay las traiciones,
sin darse cuenta murmuró:
el ruiseñor que se aleia, callado.

sábado, 21 de enero de 2017

EXCRITURA DE SARMIENTO

Sombra terrible, inútil invocarte.
En tu historia, la del mundo,
esa fuerza indomable y eterna
que arrastra a la pasiones,
al vórtice negro de la sangre
y estas palabras, su aullido.
¿Me miran tus ojos?, tiembla
el fuego sagrado de este sol.
Muerto o vivo, siempre real;
solo una sombra, mi terrible sombra.
LA OTRA RUTA

En el umbral, siempre en su silla de paja, el viejo mira pasar a los autos.
Demasiado larga es la ruta, ni siquiera puede imaginar su final. Hace mucho que no dice una palabra;
apenas, a veces, levanta su brazo para saludar al joven del carrito cuando recién empieza a sentir el sol.
Ya no le queda nada, nadie, todos también pasaron, siguieron otro rumbo. En verdad, los autos no le importan; solo algún camión, inmenso y brilloso, altera un poco sus ojos vacíos. Por suerte olvidó a las tristezas y a las alegrías, ni siquiera piensa...
Sé significa algo secreto, un temor, ese umbral; ahí, ya sentado en su silla.
EXCRITURA DE HOMERO

Ay, infelices caballos del divino Aquiles,
que derramaron tantas lágrimas
por el cadáver humillado de Héctor.

Hambre, bombas, torturas, desolación;
todo en todas las pantallas,
entre la estupidez y la indiferencia.

Inmortales caballos, afortunado su canto;
hoy ni siquiera podrían mirar,
su llanto solo sería negra sangre, y muda.
A UNA ESPECIE EN EXTINCIÓN

Ya le queda muy poco, como a esta tarde
en el fondo abierto de la casa.
Entre los yuyos, a la sombra del laurel,
mientras arma, de vez en cuando,
su mirada busca al último rastro de sol.
También la reposera siente a los años,
el peso de una vida, sus oxidados resortes.
Nada le importa lo demás, lo que sea,
el mundo -real o no- ya pasó en los 60,
y ahora está pelado y sin las franciscanas.
Con el caño listo, sube el volumen,
todavía, mucho, le gusta Gene Clark.
Ahora prefiere no pensar, y hasta se ríe
cuando ve la medallita de peace and love.
Por suerte le sobran fuerzas para aspirar,
retener el humo, cerrar apenas los ojos.
Derrotado y viejo, igual que tantos,
la mente del hippie aun se abre...
Lejos de la inmensidad del universo
el recuerda otra tarde, unos collares,
sus colores en el pasto de Plaza Francia,
esa melena de fuego que amó por primera vez.

viernes, 20 de enero de 2017

EXCRITURA DE KAFKA

En la puerta de cada una de todas las casas,
el mismo guardián.

Nadie sabe cómo apareció, pero ahí está, firme;
la ley es aun más severa.

Para algunos al fin se cumplen sus deseos,
ya no tienen miedo.

Otros, muy pocos, lo espían por la ventana;
pero no soportan su mirada.

Por suerte la mayoría lo ignora, viven tranquilos
y concentrados en la pantalla.
REALIDAD CRIMINAL

Pibes limpian parabrisas en ruta:
negritos, futuros criminales.
Muchas miradas compadecen...
pero asco de acariciar sus pelos.

Pibes pasan, entre los autos,
con sol, baldes, trapos roñosos.
Hasta la tarde y el fiambre,
una coca y ya está todo bien.

Pibes ríen o gritan, se huelen
el turno para continuar el juego.
Después pegan nariz un rato
y siguen pibes con sus monedas.

Pibes como mariposas nocturnas:
Las mantas sucias, los pies desnudos,
y duermen muy lejos de la luna.
Pibes, las pesadillas de la realidad.

EXCRITURA DE SAMUEL BECKETT

Sé que estamos acá para siempre, desde siempre,
inmóviles, en este extraño lugar.
No me he parado nunca.
Aunque más sencillo es soltar la muletas
y desplomarse y basta o peor.
Cuando llego a la orilla, me vuelvo
hacia el interior, mi camino.
Alguien creerá que se trata de un círculo,
vacío, absurdo, y se equivoca...
Claro que mejor sería tener un cuerpo
o atribuirme un espíritu;
pero la voz insiste, vuelve a intentar,
nunca hay que esperar que desaparezca:
¿dónde ahora? ¿cuándo ahora? ¿ahora quién?
Sin pensarlo demasiado, apenas puedo escribir yo.

EXCRITURA DE QUEVEDO

En las brumas de la luz
casi desfalleciente,
ya llega la otra vez noche,
tan tímida, certera;
no la anulan los versos,
tampoco los amores
que son solo recuerdos,
esa vela temblorosa.
Claro eso no es lo peor
mañana saldrá el sol,
el círculo sin fin,
su misterio rutinario.
y él evita a las muecas
junto al abismo;
inútil anotar una idea,
la última, solo un par de versos,
que tramposas las palabras
casi como respirar.
Solo es otra jornada,
lejana a la ilusoria eternidad.
UNA RESURRECCIÓN

Otra mañana empieza en la casa.
Mis pisadas frescas cruzan el patio
hasta la cocina y los primeros mates.
Los hilos delgados del sueño
ya abren la realidad en la ventana.
Me asomo a la mirada, respiro
la suave desdicha de un nuevo día.
Esos mínimos señuelos del acá
que no necesito escribir para saber,
y sentir que en este así me existo
y con un amargo y un cigarrillo
casi nada más me importa de verdad.
Sé que la eternidad está a punto
en el humo que sube, se deshace,
la tibieza limpita de la espuma,
el contorno cercano de los ruidos.
Yo soy lo que se mueve y confío:
aun la vida no le pertenece a nadie.


jueves, 19 de enero de 2017

EXCRITURA DE HUGO MUJICA

Antes de la mirada,
y la piel:
las primeras luces:

otro posible deseo
algo así
como el único perdón,

su horizonte;.
ese entrar al origen,
descalzo,

sin alma, sin pena,
abrir los ojos.
y después las preguntas.
EXCRITURA DE GEORGE TRAKL


Perdido,
el último viento
cerca del muro negro,
sordo,
ya olvida
la voz del canto
y su única piel:
el adiós.
EXCRITURA DE MANUEL J. CASTILLA

Apenas un azul
y los ojos perdidos en la alfalfa.

Ese temblor,
la caja late la ternura del galope.

A tu cintura
el aire le canta y le roba la piel.

La luna,
su brillo, ya abre tu dalia morena.

Y el sauce que llora.
Al fin llega el carnaval de Eulogia.

EXCRITURA DE DOSTOIEVSKI

Para olvidar, inútil, su desesperación.
Dostoievski escribía la historia de ese príncipe idiota.

A veces, entre tantas digresiones,
sus dudas se le confundían con el hedor de su aliento.

O sin querer, en sus ojos cansados,
los ojos sin ningún sentido mojaban papel y palabras.

Ni siquiera él lo podía entender,
por eso evitaba a los espejos y el aliento de los otros.

Cada día más insoportables, hondos,
los ataques fatales de amor se burlaban de su esperanza.

Tan solos y aun más enfermos, los dos,
jamás podrían escapar del horror absurdo de este mundo.

Pero la novela tiene un punto final,
y yo la puedo olvidar con un gesto en cualquier anaquel.
EXCRITURA DE UNA EXCRITURA DE JOSEPH TSARFATI


Lejano, el aire efímero de esa paloma
acaso está cerca de mis huesos.
Viaja, aunque no lo sabe
hacia el sol de otro horizonte,
quizás hasta mi soledad.
Quiero imaginar su tristeza,
tan sola, la inmensidad.
pero solo es el fondo de mi alma,
irreal, absurdo y frágil...
Hasta estas las palabras
ya son parte de su ausencia.viva,
y aunque el cielo está abierto,
preso de sus alas, inmóvil,
apenas puedo soportar el peso del cuerpo.
EXCRITURA DE ROBERTO JUARROZ

Ya se sabe que la deseada felicidad,
aunque posible, es más que dudosa,
al final pierde el juego y rápido se olvida.

Todo lo contrario de Hollywood,
porque cuando termina la historia
nunca se escuchan los aplausos, apenas llanto.

Por eso conviene estar muy atentos,
abiertos los poros y el alma, y esperar
que la felicidad sea el lugar de un llamado.

Pero igual no hay ninguna garantía,
ni siquiera sabemos si de tan perdidos,
podemos distinguir el camino hacia esa voz.
EXCRITURA DE PIOLINES INVISIBLES

Es imposible engañar a ese mágico engaño:
las fantasías de los niños,
sus últimas verdades.
Así que nadie, ni siquiera el más tonto,
me va a convencer:
los títeres sufren, y mucho.
¿Quién se aguanta a esta vida,
hasta la mejor,
atado a unos piolines?
Y todavía más atroz, cada noche,
el encierro en la valija.
Pero como todos,
 ellos hacen su trabajo,
incluso escuchan risas,
 y algunos los aplauden.
Eso sí, y demás está aclararlo,
no juegan con el odio
y nunca el engañan al asombro de la niñez;
pero son tantos nuestros piolines,
inevitables, de acero.
Fatales, ya se olvidaron de la magia.

miércoles, 18 de enero de 2017

EXCRITURA DE EZRA POUND

Ojalá alguien me compadezca,
pero no entiendo.

Aunque también acepto el odio,
más razonable.

Apenas miro desde la ventana,
no soy ese árbol.

Nunca supe qué era esta vida,
solo vi el desastre.

Si acaso todavía es algo posible,
pido el poco perdón.

Salgo de rodillas a sentir el viento,
y no me dice nada.
EXCRITURA DE JORGE BOCCANERA

Este cielo ya es una esponja
que devora los pájaros,
las palabras,
apenas sus cagaditas.

Últimas manchas del amor,
del nunca y para siempre;
o ni siquiera,
¿acaso alguien abre sus alas?
EXCRITURA DE RUBÉN DARÍO

Ante lo tanto de dicha y dolor,
cada día.

Entre lo que no conocemos,
los árboles.

O apenas sospechamos,
las piedras.

El temor de algún racimo,
esas sombras.

Las preguntas sin respuestas,
nuestras voces.

Solo ser, y ser sin ningún rumbo,
el estar vivo.

martes, 17 de enero de 2017

EXCRITURA DE LOS 4 ELEMENTOS

El cielo al fin se quedó ciego.
El fuego enfría el amor.
La tierra, ni siquiera un baldío.
El agua ya no corre, grita.
EXCRITURA DE CHARLY GARCÍA

A vos, lo sabemos, esa pared nunca te gustó,
tampoco las noticias del bien ni del mal.
Aunque hace una hora que estás ahí:
vacíos los ojos de video tape.
Sabés que al revés o al derecho
lo que gira, ahora y siempre, no es el mundo.
Claro que podés pensar en la entropía
o intentar una variante de la teoría cuántica;
total nada se entiende y no para.
Pero en las cosmogonías de cualquier siglo
lo más importante es el calefón;
desde que lo descubrió Discépolo
se convirtió en la expresión de nuestro misterio,
como el cajón con las toallas, las medias
y esa foto al fondo de la mesita de luz.
Tan simple suelen ser estas cosas,
especialmente bajo la ducha y en invierno,
a punto de empezar con la canción,
cuando sin razón se apaga otra vez el piloto.
Entonces ya no tenés más excusas,
insultás, pataleás y gritás otra vez tu nombre.
Así, sorprendido, te das cuenta que nadie,
nada, ni la valija, y solo te queda el ya fue...
Ves que la vida entera es apenas un momento.
ese instante mudo del temblor
en la última vez del otro lado de la palabra frío.

EXCRITURA DE EMILY DICKINSON

Creo que aun estoy un poco vivo,
lejos o en las ramas abiertas de mis manos.

A mi boca, ya decidida y muda,
no le importa el aliento en los espejos.

Solo desea a la palabra carmín,
tibia, justo en la puntita de la lengua.

No sé si todavía tengo una casa,
aunque esa puerta se abre, tan temerosa.

Y todas las visitas son sombras,
altos árboles en otro horizonte, sin sol.

Creo que alguna vez ha nacido,
perdido en la naturaleza del ser: el infinito.
UNA EXCRITURA DE LAS PALABRAS

Si se pudiera conocer la verdad de las palabras, escuchar su voz, sentir la huella pura y animal, ese despiadado origen; ¿quién se animaría a escribir un poema?
Aunque, por supuesto, no sé cuál es la respuesta; ya no tengo la menor duda. Ante esa hipotética situación prefiero el cofre sagrado y falso del silencio, el consuelo inútil de andar, solo, por las callecitas abandonadas del conurbano, imaginar otra vez la historia de cuando se espera lo que jamás vendrá o sentarme acá, frente a la mirada de la ventana, y fumar un cigarrillo y conversar con la lengua del humo que se pierde, lenta, desaparece, en la mueca invisible del aire.
La verdad es que no quiero saber lo que dicen las palabras, me da un poco de miedo; simplemente escribo para que alguien lea, cualquiera o todos, menos vos.

lunes, 16 de enero de 2017

EXCRITURA DE JORGE SEMPRÚN

Solo sé que la frontera del Mal
no es lo inhumano.
Pero ya no poseo nada,
salvo a mi muerte,
su experiencia; esos cuerpos
despojados en los Campos
para sentir mi vida,
poder expresarla...lo sé.
Quizás busco apenas un yo,
reconocer este rostro
y atravesar su mirar,
ese abismo al borde de lo humano.
EXCRITURA DE FAVIO

Para mí, llorar es lo más lindo de la vida.
Yo me encierro en el baño,
solo, y me pongo debajo de la ducha.

Pero quisiera llorar como un bebé,
con la boca abierta, grandota,
una o llena del dolor por el tanto asombro.

domingo, 15 de enero de 2017

EXCRITURA DE CARVER

Desnuda, ahí, en el fondo más azul del lago.
Al llegar, todos la vimos.
Durante el fin de semana pescamos
bebimos y la pasamos bien,
como suele ocurrir entre amigos.
Antes de regresar hicimos la denuncia.
Nosotros no la asesinamos, no hicimos nada.
EXCRITURA DE NERUDA

Una gotita de tu nombre
en mi silencio
ya cae.

En ese frío y perdido sueño
que hace rodar
el olvido.

Tan parecida a la tristeza
su leve dolor
tan lento.

Pero apenas es esta lluvia
y la lejos la mirada
en el cristal.

EXCRITURA DE LEÓNIDAS LAMBORGHINI

Otra vez descolocado,
solo solicito una butaca, en cualquier fila,
para ver el espectáculo.

Lástima que mi risa negra,
en el país tuerto del rey ciego o al revés,
ya vendió los dientes postizos.

Poco a poco, rapidísimo,
la vergüenza ni siquiera es el olvido;
aunque peor es recordar.

Al Divino Botón
lo aturden los porcentajes de los tarifazos,
las plegarias no cotizan...

Cada cinco minutos,
con exactitud, el tren de tanta alegría
atropella a otro miserable.

Pero las inversiones
¡qué suerte! muy pronto nos harán extranjeros,
A la mierda esa bandera.

Yo me detengo acá,
y entrego la dignidad con los documentos;
al fin empieza la función.



EXCRITURA DE DIONISIO AREOPAGITA

Ningún número exacto en todo el universo,
ningún orden.
Tampoco el viejo logos,
y menos pensamiento.
Ni el consuelo de la imaginación,
o algún oráculo
que distraiga con su enigma,
su solución imposible.
Afuera y adentro,
el cuerpo es un vacío,
casi un descuido..
Detenido en la mirada
el misterio parece una burla.
Todo niega
la única evidencia real.
Esa afirmación del no en reposo y mudo: Dios.
SUSURRO DE MONOS

Ese rincón con plantas de telas de araña
no nace de la palabra ausencia.
Apenas un latido miserable al borde,
ya sabido, del consuelo del fracaso.
Pero rápido desparece en los márgenes
que juntan las sucias correcciones;
los intentos de creer, tan inútiles,
en el milagro banal de alguna forma.
Para escribir ni siquiera hay pan duro
en el fondo sin fondo del pozo;
solo el susurro de los monos tristes
con el que sueñan los últimos poetas.
Por eso me cuelgo al ras del cielo
y veo el temblor de otra mirada
junto a la lamparita sobre estas líneas.
Después me olvido, y aprieto en un puño
el papel que ya busca al tacho de la basura.

sábado, 14 de enero de 2017

EXCRITURA DE LAS EMPANADAS CHINAS

El retorno de Wang Wei
me recuerda a las empanadas de La Nona;
Solo por las de ciruela
con jamón, la especialidad de la casa.
Y la verdad que es una suerte
vivir en el país natal.
Ese gusto cotidiano de lo propio,
la lengua de la broma fácil,
como el jugo de la dinastía Tang.
Además, no hay otra manera
para sentirse un verdadero extranjero.


¿EXCRITURA DE ARTURO CARRERA?

Ya está demostrado: a los no
los atrae la fuerza irresistible y más leve del sí.

Ambas partículas juegan, siempre,
con los ciclos de separaciones, uniones y el misterio.

Todavía nadie conoce sus ritmos
ni sus colores, menos aun su fusión tan amorosa.

Pero cualquiera puede ver el fenómeno
en una noche estrellada o en un mar y una gaviota.

Y a veces estallan juntos y libres,
y el deseo encuentra, real, a la fórmula de la poesía.

viernes, 13 de enero de 2017

EXCRITURA  DE OSVALDO LAMBORGHINI


Todas las botellas vacías del vacío,
ni poesía ni prosa;
ya nadie sale en manifestación.
La parodia es la peor parodia,
como mi hermano y yo.
Si Gardel cantara con la vagina,
cada día sería otro día.
Claro que yo también puedo volver,
pero ¿a dónde?
Sin embargo, soy un genio,
cualquier frase rompe la lengua.
Lástima que mi pene
ya está cansado y mudo.
Ahora me asomo al balcón
solo para no tirarme.
Ni siquiera escucho el grito de la nada.
EXCRITURA DE MEISTER ECKHART

Sólo sé que la verdad de ese durazno,
ahí, en el borde delgado de la rama,
no se puede pensar, ni siquiera ver...
Acaso en los engaños de mi mente
ese durazno es solo un durazno;
sé que también respira, libre,
solo y confía al sol su piel de sueño.
Lo sé, mañana distrutaré su pulpa;
ese durazno desaparecerá sin rastros;
pero en mi alma todo  es el mundo;
tan sencillo, lejos de las palabras:.
sé que es inútil, pero les hablo de Dios.
HIPÓTESIS DE LA HIPOTÉTICA FÍSICA ACTUAL

Si tiene cuatro patas,
cola y ladra
probablemente,
a veces, es un perro.

EXCRITURA MAPUCHE DE LEONEL LIENLAF

Tanto han pasado los años, tanto fuego,
ya hirviendo está la tierra.

¿Cuándo entenderán mis lágrimas?

Los gritos bajan en los campos,
baja mi gente y la sangre.

¿Ustedes entienden el aire del dolor?

Otra vez la misma muerte en los esteros,
en los nidos, en las casas.

Ay, escuchen hablar a mis lágrimas.

¡Allkütumucbi ka puen pipingen!


jueves, 12 de enero de 2017

CONSUELO DE PERROS

                                     
En el balcón,
lentísima cae la tarde en el verano.

También dorado,
el sol parece dormir a sus pies.

Unos mates lavados,
y perdida, la mirada en otro cielo.

Todo es soledad,
apenas el tibio aire en el aire.

Pero despierta Baguee
y mueve, indiscreta, su cola peluda.

No se entiende,
solo en esos ojos encuentra consuelo.
MOMENTO ESCATOLÓGICO

Él no es el personaje de Joyce,
pero temprano,
indiferente,
ya se sienta en el inodoro
y, de casualidad, lee
por primera vez
los poemas de Hugo Padeletti.

Ahora no sabe qué hacer,
aliviado,
al levantarse,
su cuerpo es alma;
repite un verso y piensa
antes de apretar el botón:
hasta en la mierda está la belleza.


EXCRITURA DE ALGUNOS JAIKUX DE QUASIMODO


I

Deriva de la luz;
el asombro
tan lábil en los vórtices de sol.


II

Horizonte dolorido,
las campanas
ya callaron la voz de la tarde.


III

Noche de mirlos,
adormecido el espacio
me reclina hacia el otro final.

miércoles, 11 de enero de 2017

VISIBILIDAD DE LO INVISIBLE

Ya es innecesario el ruido del ventilador,
la brisa de la tarde se abre en la ventana
y crea esas ondulaciones verdes y celestes.
Pero no deja quieta a ninguna forma...
así que es inútil intentar cualquier verso;
aunque pronto, otra vez, llegará la noche.
Quizás conviene cerrar un poquito los ojos,
apenas una leve caricia para verla mejor.
EXCRITURA DE WALTER ADET


Con cada verso fallido
más fuerte golpea el tonto corazón
y un soplo de tristeza.

Y no sé si es llanto
o todavía me moja esa última llovizna
que escribe peor que yo.
EXCRITURA DE MONTAIGNE

Sin dudas, todas las cosas se agitan sin cesar,
también yo, que aun marcho confuso y vacilante.
En cualquier momento, puede cambiar mi suerte
o hacer justo aquello que no me proponía.
A pesar de mis años, tanto me contradigo...
y hasta me cuesta comprenderme a mí mismo.
Mi alma se halla, siempre, en el aprendizaje.
Ay, todavía soy un niño, una duda en el asombro.
Pero no me molesta; al menos tengo una verdad:
la vida no es más que una perenne agitación.
EXCRITURA DE EL JUGUETE RABIOSO

Siempre será así, menos que nada, nadie;
él es la pura rabia sin ningún destino.
Entre los dientes apretados de tanto odio
y otro fracaso, sus ojos solo puede ver
los bellos edificios de la humillación.
Pero en una esquina ya demasiado oscura,
también hay otro cuerpo abandonado
entre papeles, mantas sucias, olores infames.
Algo por fin vuelve a latir en su pecho
y busca, tiembla, los fósforos en el bolsillo.
Solo espera para ver a las primeras llamas.
EXCRITURA DE ENRIQUE BANCHS

En el pecho
aquella tarde perdida de mayo.

Solo cristales
en la mirada del crepúsculo.

Un yuyal,
el alma que borró sus colores.

También pájaros,
¿acaso su canto es la tristeza?

Y la casa,
puertas y ventanas dicen nunca.

Nada es un sueño,
apenas esta ausencia es real.

En el pecho,
muy lejano, el recuerdo sin latidos.

martes, 10 de enero de 2017

EXCRITURA DE JUAN RULFO

Yo estoy loco, nunca se me acaba el hambre.
Sentado junto a la alcantarilla, atento,
hasta que salte alguna de las ranas.
Los sapos no se comen, aunque a veces...
Pero Felipa siempre me espanta los miedos,
y que no me crea la condena del cura.
A ella la picó una avispa en una nalga,
toda la noche le unté saliva y rezamos.
A veces ella me da su leche, suspira,
y así mi tanta hambre tiene otro saborcito.
A mí se me confunde mucho la vida,
nunca se me aclara qué es lo que pasa.
Así que estoy con mi demonio en la alcantarilla.
EXCRITURA DE LEONARDO FAVIO

Sé que, como sea, voy empujando,
a cada paso, a toda la materia.
También, aunque no lo veo,
creo que existe y lo puedo sentir.
Claro que es un gran misterio,
pero más misterio es el amor.
No sé, muchas veces me pregunto:
¿primero el amor y después mi Dios?
EXCRITURA DE PIZARNIK

Soy ese animal que sueña
las cenizas del cielo.

Aquel reloj roto,
perdido en la mirada.

O apenas un muro,
herido, muda su memoria.

Una fosa de palabras,
solo me respiran los huesos.

lunes, 9 de enero de 2017

UNA EXCRITURA POST-PERLONGHER

Todos lo saben,
si hasta lo pasan en Youtube
Por todos lados
hay cadáveres,
(hasta exquisitos).
Sin ninguna exclusión,
blancos, negros,
un poquitín verdes.
En plazas, colectivos,
cajeros... y muchos
todavía floran en las aguas.
Insoportables,
atraviesan la historia
y, a veces,
alguno, perdido,
se esconde en tu ropero.
En general,
no suelen molestar
a nadie, o casi...
pero cuando cantan
siempre desafinan.
Ayer encontré a uno
en el bolsillo,
no sé si no me robó
las pocas monedas..
De todas maneras,
nadie quiere saber
si son o se hacen,
ni siquiera los miran,
salvo en el noticiero
y nunca falta
el entretenimiento
para no creer
en cualquier otra cosa.
Pero poco importa,
salvo ese viejo problemita,
el mismo de antes::
ese olor aun es tan real.
PÁJAROS DE LA TORMENTA

En la despareja música de tantos truenos y la lluvia
el grito de algunos pájaros.

No los puedo ver, estarán bien escondidos
o habrán encontrado un reparo.

Sin comprender, apenas escribo estas palabras inútiles;
quizás, como ellos, solo deseo volar.
CLIMA POÉTICO

Sin aviso, la tormenta también se llevó la luz.
De pura suerte encontré esta vela
que tiembla y apenas, algunos instantes,
me ayuda frente al viejo y digno papel.
Así de simple, el momento justo para el poema.
EXCRITURA DE BALDOMERO FERNÁNDEZ MORENO

Ya todo se ha borrado,
tus ojos,
tu boca.

Dos mariposas muertas,
la mirada,
el aliento.

Todo, ni una sombra.
Ese amor,
su metáfora
y el crepúsculo del poeta.
EXCRITURA DE OSVALDO LAMBORGHINI

Cada vez menos son las ganas y aquello
que se llamaba ideas.
Recién, ni siquiera pude mirar mi sombra
sin evitar el desamparo del mundo.
Por las trampas del deseo
cualquier jueguito se pierde y todavía es peor.
Ahora solo nos quedan los malos poemas
y esa alegría infantil:
fortalecer cada vez más ningún fin,
cansarse, aterrarse, olvidarse, estornudar y sonreír.
EXCRITURA DE JUAN CARLOS BUSTRIAZO ORTIZ

Más de diez mil años;
soles, lunas, fuegos, aullidos, cazadores.

Las pieles pintadas y rotas,
y la sangre ciega y negra y aun fresca.

El engaño es el tiempo,
aunque se esconda en la barra del bar.

Pero nada queda en olvido,
ya saborea mi cuerpo un vino destripado.
EXCRITURA DEL MARQUÉS DE SADE

Nadie quiso oír mis sinceros pensamientos
y me inventaron el encierro y la locura.

Pero, lo saben, las palabras vicio y virtud
ya se han convertido en ruidos sordos.

Ninguna acción, ni la mayor atrocidad,
recuerda el remoto significado de crimen.

Así de simple, hoy y siempre, es el mundo;
no existe el horror que no haya sido divinizado.

Si lo hubieran visto al gran Dióniso...
y contemplado la sabiduría plena de la nada.

Algunos todavía creen que estoy muerto,
yo me río con desprecio y espero el peor final.
REUNIONES DE AA


Enfermos, despreciados por demasiadas miradas
y una buena parte de la vida y la fortuna,
durante dos horas, casi a escondidas,
conversan sus muchas penas y algún festejo.
Todos los días la misma ceremonia,
la misma rutina para poder sobrevivir.
Solo ellos saben que las 24 horas,
tan frágiles, son el tiempo de su salvación.
A veces, las palabras rompen sus voces;
otras, ocultan en el temblor de una caída.
Condenados hasta el último día,
su castigo mortal es la primera copa.
Ellos toman mate o café, y antes de irse,
como niños, arman la ronda para decir su plegaria.

EXCRITURA DE FABIÁN CASAS

Esos vientos de la memoria
nunca descansan en paz;
ni padres ni madres, jamás,
aunque olviden a sus rostros.
Están siempre por ahí,
aterradores  dulces,
y nos regalan sus sueños
ese trencitos, algún chirlo,
muchos caprichos,
rabias que duran poco,
y tanto olor de ausencia
en los pasillos de ese  hospital.
Solo en lo más trivial
la dicha distrae a la risa,
una película de Bruce Willis,
un tropezón en la vereda,
la grosera forma de una nube:
un culo enorme en la ventanita,
como si pasara el tiempo
que ya resignó su respiración.
De todas maneras, se vive
-¿se vive?- , y no queda otra.
Igual es inútil, o al revés:
nadie entiende el mero estar vivo.

domingo, 8 de enero de 2017

EXCRITURA DE JOAO CABRAL DE MELO NETO

Aquel río,
espeso como un perro
y sucio
en las memorias.

Sus colmillos
brillantes de hambre
y filosos,
más que lo real.

Su ferocidad
contra la tierra y el cielo
y el dolor,
ese estar de lo turbio.

Aquel río,
en lo siempre profundo
y libre
en el fluir de las vidas.
EXCRITURA DE UN VIDALA

Quién sabe,
vidita, si volveré.

Por esa senda.

El alba
ya aleja el cerro.

Por esa senda.

El agüita
solo es el adiós.

Por esa senda.

Esa pena
en andar andando.

Por esa senda.

Quién sabe,
palomita, si volveré.
EXCRITURA DE SOR JUANA


¿Algún día podrá alejar el cuerpo
a este amor infame?

¿Por qué, ay, la divina razón
no me lo impide?

¿Mi dolorosa y tan dudosa pena
sanará al confesarlo?

¿Siempre en toda esta piel
la malicia del pecado?

¿O acaso no será el mismo Dios
la fuerza del deseo?
QUERIDO DIARIO

A veces, como hoy, pienso que lo único que nos queda es encontrar ese fulgor anterior, volver, irnos lejos, otro regreso para salir de esta historia y llegar justito antes del primer paraíso.
Después de tanto amor y muerte, belleza y muerte, palabra y muerte, ya no se me ocurre nada mejor que la mirada muda de los peces.
Quizás al perdernos en algún origen se pueda recuperar al menos una experiencia verdadera; no sé, capaz que la solución es comprarse una pecera y aprender a respirar en el silencio del agua.
EXCRITURA DE HOMERO EXPÓSITO

Lejano, el callejón apenas existe
en un tango.

Perdidos de la mano, el recuerdo
y los yuyos secos.

En el perdón el último llanto, ese,
tu país perdido.

Ya nunca se vuelve de tus trenzas
ni de aquel portón.
EXCRITURA DE SALVADOR ELIZONDO

Solo escribo lo que no escribo.
Pero en mi mente es aun peor,
escribo la nada. O lo imagino,
me veo escribir la nada sin mí.
Así que escribo lo que no veo.
y en mí la palabra es el terror.
Ya no hay escape de mi mente,
mientras escribo imagino la nada.


EXCRITURA DE NICANOR PARRA

El niño que al fin detuvo su vuelo
en la torre de la antigua Catedral,
ya no juega con las agujas del reloj:
con sus manitos quiere detener la historia.
Pero los transeuntes caminan apurados
-todos tienen un horario que cumplir-
o se detienen ante las vidrieras.
Nadie escucha el estruendo final de la caída.

sábado, 7 de enero de 2017

EXCRITURA DE CHARLES SIMIC

Una escoba puede ser un árbol
y una cucaracha.
O tal vez una paloma azul.

Cualquier cosa puede ser otra;
un cuervo es la nieve
en el sueño de los niños.

Hasta la peor celda roñosa
con olor a mierda...
¿no es un paraíso para el poeta?

La enumeración es cansadora,
mejor no escribir más
o aceptar la verdad de un etc.

Pero cuidado con las escobas,
ellas saben volar
y son las preferidas del diablo.
EXCRITURA DE ARNALDO CALVEYRA


La tarde, oculto entre los otros; costumbre del estar ausente, ahí, sentado, frente a la fuente de la plaza.
O muy lejos, perdido en el recuerdo; apenas esa lejana música, tan cristalina, y el alrededor íntimo de una voz.
Sentir la confidencia, solo mirar las aguas.
EXCRITURA DE ALFREDO LE PERA

Lejos,
aquellas luces del retorno.

La vida
en las nieves del tiempo.

Ya huye
la última ilusión de viajero.

Ni en sueños
ese eco falso del volver.

Lejos,
el fin se detiene en el andar.
A BILL EVANS

Hay algo,
no sé bien qué
y menos el para;
porque si no es imposible.
Ni siquiera
un gran misterio;
algo, apenas,
sin ningún más allá.
Yo digo
que no se puede entender,
y solo pienso
o vuelo
al sentir tus manos.
EXCRITURA DE SHAKESPEARE

Vos lo sabías, ya se ven las ruinas de tus obras.
La última tiranía se proyecta
y sus pantallas solo piden sangre,
si hasta el rostro de los niños
apenas pueden ocultar sus crímenes.
En el teatro de este mundo
nadie representa la inocencia.
Comedia o tragedia, todo da igual:
ningún sueño, despertó la pesadilla.
Vos lo sabías, ya las furias espantaron tus versos.

UNA NARANJA Y UN TOMATE

Ya sé que no es aquella naranja de Canton,
apenas un tomate verde.

Hace varios días está en mi cocina, solo,
sin querer se cayó de la planta.

Al comienzo casi me parecía un adorno;
ahora, empezaron las dudas.

Tan chiquito, parece el corazón del mundo
o la última esperanza.

Y a cada momento aumenta más mi temor,
ni siquiera puedo tocarlo...

Ya sé que un tomate no es igual a una naranja,
pero nada evitará la pudrición.
A LOS PUESTEROS DE CATÁN

A los costados de la Estación de González Catán
los puesteros zombies venden sus días
o sogas con piedras para los inundados.
Solo respetan ese antiguo olvido del arte:
se cortan las orejas hasta aturdir con las ofertas.
A veces matan a las mariposas a gargajos
mientras miran el reloj detenido en el andén, burlón.
Y todas las noches sueñan un gran tren
con una dentadura gigante que arranca las vías,
aplasta sus cacharrros y despedaza al mundo.
Así, más o menos, son las caras de los puesteros,
sin moralejas, ahí, como si realmente estuvieran vivos.

viernes, 6 de enero de 2017

EXCRITURA DE ROCHESTER

Yo que soy un hombre,
esa extraña criatura,
prodigiosa,
soberbia,
tan inteligente,
irracional,
libre,
carne y sangre,
acaso un espíritu;
para bien o para mal:
¿Qué es la verdad que soy?
EXCRITURA DE ALICIA

Quizás nunca terminaría de caer y caer y caer.
En verdad, cualquier cosa era posible.
No podía entender los personajes del lugar.
Para colmo, también sentía que era otra
o mil o el puro devenir del asombro;
y por momentos, confundía la gracia
con la perplejidad absurda y la confusión.
Nada era lo que parecía, ¿así era la vida?
Ninguna regla sensata, todo imprevisto,
sorpresivo, y una continua arbitrariedad.
O quizás era la misma niña caprichosa,
sola y perdida en los juegos de la palabras.
Confundida, entre la locura y el terror,
al fin pudo escapar, volver, pisar la tierra.
Y recién entonces comprendió la maravilla,
supo que ése, para siempre, sería un lugar irreal.
EXCRITURA DE CAVAFY

Esas visiones lejanas del amor
hay que guardarlas,
por ahí, escondidas, intactas...
rinconcitos del ayer.

Es que casi siempre,
en cualquier momento, aparecen,
como versos de un poeta,
Vivas ilusiones del viejo futuro.

No sé, la verdad, creo
que son lo único que vale la pena.
EXCRITURA DE HENDRIX

Mi cuerpo,
una niebla púrpura.

La vida,
solo una guitarra.

Alucinado,
ya todo es irreal.

El cielo,
apenas un hechizo.

Soy eterno,
el fin de otro mundo.


jueves, 5 de enero de 2017

EXCRITURA DE LA BEATITUD

Tachar a la palabra sol,
también viento
y trigal.

Solo dejar al horizonte.

Esa distancia de ilusión
que siente, duele
y calma.
EXCRITURA SOBRE CARTAGO DE SAN AGUSTÍN

Los ojos desnudos de ese negrito
aun me tocan en este instante.
Apenas éramos dos jóvenes felices
con sus juegos de lagartijas,
de escolopendras curiosas al sol.
Pero él crecía tan rápido y sus bailes
y la gracia se derramaba en el alma,
súbita. una eternidad sobre la piel.
Todavía se asombran mis ojos,
mi cuerpo tiembla en la oscuridad.
EXCRITURA DE JUANELE

Este invierno ya no será un sueño oscuro. Un horizonte
tan frío,
lejos de la leña.
Todos verán el paisaje de la desnudez. Y esas florcitas
en la distancia,
algunos pastizales.
Al fin una alfombra sagrada solo para el puro silencio.
Andando en las mañanas,
caminando la noche.
¿Pero qué es ese hombre deshecho junto al rancho deshecho?
EXCRITURA DE WANG WEI

Como siempre, entre los bambúes, ocultas,
las palabras de las lavanderas.
Los sauces mantienen el silencio
y poco a poco, sobre las piedras,
las ropas limpian sus pequeñas manos.
Todo se diluye en el aire otoñal,
el rumor invisible de una paloma,
la espuma tan frágil en la orilla
Ya llega lento, otra vez, el mediodía
junto al final de la tarea cotidiana.
Pero el agua aun piensa en el cielo:
ante la soledad espera el consuelo del sol.

EXCRITURA DE UN REGRESO

Andando con pisadas ajenas,
aun sin saber el rumbo,
otra vez vuelve a su casa.
No escucha a los árboles
ni la insistencia de esa voz,
muda, que olvida las palabras.
Tampoco entiende a sus manos,
ese temblor en los bolsillos,
el fondo ya sin fondo.
A veces pasa, solo un desvío
y se pierde la orientación,
como si fuera el Dante
que no encuentra el otro mundo.
Pero justo descubre su calle,
la vereda y un perro
que busca en la basura.
Apenas escucha sus latidos,
los golpes en el pecho,
lejanos, ecos del vacío.
Solo faltan unos metros:
¿quién es el que llega,
busca las llaves, un amparo?,
si nunca abrirá la puerta
y buscará a su sillón,
 sin pensar ymirando fijo
a la lamparita del cielo raso,
la señal ciega de su eternidad.

.
EXCRITURA DE ALEJANDRO URDAPILLETA

¿Dónde han ido los hombres
que fueron a la guerra?

¿A columpiarse los huesos
entre alaridos y bombas?

¿A pasear sus entrañas rotas
por la agonía del barro?

¿ A convertirse en tanques,
fusiles, cuchillos?

¿A enterrar sus miradas,
el horizonte, el sol?

¿A olvidar esta estúpida vida,
sus odios y sus amores?

Ah, no me importan las respuestas.


miércoles, 4 de enero de 2017

EXCRITURA DE WALSH

Nací muy lejos, en Choele - Choel,
ahí, en su viento de olvido
de vez en cuando late mi corazón.

Tuve muchos oficios:
limpie ventanas, lave copas, criptógrafo...
Después quedé sin vocación.

Un buen día comprendí
que existía un mundo, amenazante.
No imaginé cuánto.

Anduve entre fusilados vivos,
me compré un revolver para escribir
y soñé atardeceres en el Tigre.

También viajé a la Revolución,
me aburrió, pero no me pude resistir
a las caderas de la cubanas.

Otro día, imposible, mataron a mi hija.
Sé que me quiso, y la quise,
pero necesito ver su sonrisa otra vez.

Así, perseguidos, morimos los dos
en la peor oscuridad; ya sabés,
y nuestro único cementerio es la memoria.

Mi nombre es Rodolfo Walsh,
apenas un yambo aliterado;
todavía, a veces, lo leo en algunas banderas.
EXCRITURA DEL MARTÍN FIERRO

Al romperse la viguela
solo las orejas sordas.

Miseria del otro canto
y todavía el mismo.

Un desvelo de la tierra
que sepulta a la derrota.

Coplas sin ese vientito
para seguir a la esperanza.

Así enmude un poco más
el consuelo del espanto.

Nadie recuerda el rodeo
ni el coraje de su toro.

Los males no importan
cuando la risa es el llanto.

La historia busca un facón
al resignar su destino.

Inútiles todas las quejas
que apenas son el olvido.

Ni siquiera ese consuelo
al saberse hermanos.

Y además en este acá,
ya no hay quién se ponga
EXCRITURA DE LEÓNIDAS ESCUDERO

En defensa de mi jardín:
matar las hormigas.

Encima el pie, y pocas
logran escapar.

Son víctimas, pobrecitas,
ellas no saben.

Pero a veces yo también
soy hormiga.

Aunque admire las rosas,
tampoco entiendo.

Y ese misterioso pie, fatal,
ya acerca su sombra.
EXCRITURA DE CIORAN

Hacia lo concreto y lo vacío,
todo lo que elude las trampas de cualquier razón.

Pensar a los saltos, perderse;
el meditar es convertirse en una idea falsa.

O abismarse, desaparecer, exclamar...
la felicidad del deseo solo aparece en su ausencia.
EXCRITURA DE RESPONSO

El borracho, vencido, perdió la última apuesta
y una vez  más se miente un responso.
Caído, no duelen las patadas y las trompadas,
tan solo fue lo que no podía ser.
Claro que aun puede hacer un esfuerzo,
pero son las reglas del juego, también la vida;
además, ¿qué es lo verdadero... y lo digno?
Ya se sabe que todo lo real, enturbia;
por más que uno haga los mejores planes,
hasta engañan las cartas marcadas.
y tampoco se detiene ese camionero,
que pasa rápido, como el olvido.
Desde el barro, la gloria es otra burla,
el miedo del carnet escondido en algún cajón.
Ni el tango de Gardel va a volver, lo sabe.
Primero te bombardean, después te humillan,
no queda otra cosa que saber perder, ¿no?
Además, y para colmo, siempre llueve.
Ahora lo atrae ese árbol, sus florcitas azules,
y así se duerme cansado de mirar las tantas noches.
MALDICIÓN MATEMÁTICA

Algunos aun confían en la matemática,
miran el cielo y escupen geometría
en nombre del venerado y condenado Galileo.
Nunca les molesta las tormentas
ni la amenaza de los agujeros negros.
No se detienen a observar la sombra, palpar
el horror de cualquier dedo triste
en la pancita áspera de las almendras.
Pero por suerte, acá, lo tan negado
ya pinta en las paredes el graffiti Tadey:
¡SANDALIAS O CHANCLETAS!
Así es como te escribo algunas palabras
apenas para poder lo que no se puede decir,
Y después me olvido y ni siquiera las firmo
porque quiero que nadie las lea,
no quiero ver las estrellas y me entiendas vos.


EXCRITURA DE VICENTE ALEIXANDRE

Ondas que alma
que sostienen el brillo ilimitado.

Alma con olor
como una inmensa pradera.

Carne casi soñada,
desnuda porque solo es para ti.

Mirando, teje
lenta ese misterio de la unión.

Su sola verdad
ya se desliza suave en el cuerpo.

martes, 3 de enero de 2017

EXCRITURA DE DIANA BELLESI

La ilusión de las aguadas
en la memoria del vientre materno.

A campo traviesa, libres,
los potreros que rozan la cintura.

Ese lejano latir, perdido
y más fuerte, belleza del pavor.

Aquello en lo viviente:
finitud y eternidad atadas al poema.
EXCRITURA DE OSCAR WILDE

Para un corazón sincero, el odio
es la peor condena.

Yo también tuve ilusiones, y pensé
que era comedia la vida.

Una vez caída la antigua máscara,
ay... la tragedia.

No te asustes, el mayor de los vicios:
la fría banalidad.

Todo lo que llega al más adentro,
vive y es justo.

Lastima que para nosotros, siempre,
la estación es el dolor.

EXCRITURA DEL CUCHI LEGUIZAMÓN

Tan profundo, en el silencio,
lloraré.

El olvido de la inocencia
y los caminos.

La alegría de la amistad,
tragos de vino.

Esa guitarra de la tierra,
su luna y su sol.

Los regresos de madrugada,
la puerta abierta.

A pesar de los huesitos,
solo dolores.

Lloraré de vos, ay,  al irme,
toda la vida.

Tan ciego como el amor,
y en el infinito.

Pero el viento traerá la zamba,
su sombra.
A CARLITOS BUKOWSKI

Creo que en los últimos años recién te vi;
uno de esos cadáveres en el fondo,
lo oscuro, de cualquier barcito.
Solo, y bebías una y otra y otra cerveza.
Así tomabas nota, no como Sartre:
apenas mirabas el hedor del ambiente
y las voces y los gritos te dictaban versos.
A veces sospeche tu sonrisa,
una botella estallaba en el aire.
Cuando yo todavía todavía era un pibe,
solía decir que lo tuyo era un recurso.
Después los tantos años, y después...
Apenas te vi entre mariposas y la noche
y la poesía, ¿qué más es el vivir borracho?

FASTIDIO DE LAS MUSAS

Hoy no hay manera ni engaño,
espera y humo
Ni un eco remoto,
imágenes mudas
Tampoco un jueguito,
y la sorpresa...
Andarán en otra,
ya olvidaron mi cuerpo.
Hoy me quedé solo,
no me soportan ninguna palabr
EXCRITURA DE SAN JUAN

Solo vacío el adiós en la mirada;
ya ni en la vida
ni en mí.
Ay, Paloma, ausencia en tanta pena.

¿Dónde dejaste mi amar herido?
Las entrañas mudas
por tu aliento.
Ay, Paloma, tiemblo ante las flores.

Soy el aire de tu vuelo, el último;
apenas gemidos
y el llanto.
Ay, Paloma, todo perdido sin el cielo.

lunes, 2 de enero de 2017

DONES DEL ESTAR

Nada más que una charla
a la sombra, unos vinitos y algunas canciones.

Chistes y teorías tontas,
las simples voces de un rato de amistad.

Tan poco esta vida,
apenas esa milagro de compartir al otro.

Pero, ¿acaso más es posible?
Al menos así pasó la tarde y cae el solcito.

Lo demás, ya se sabe,
ese silencio fatal tan parecido al horror y la nada.
EXCRITURA DE LOS ATENTADOS


Todavía dormido, las manos en los bolsillos.
las misma calles, frías, hasta la ruta.
Saluda a los vecinos y mira la nada,
esos pocos segundos sin sentido.
Ya sube al 96  para llegar a flores.
después el subte, y a  la obra.
cargar y descargar, hacer el cemento.
Cada día, casi unos treinta años;
todos lo quieren en la empresa.
Al terminar el apuro y el cansancio,
vuelve apretado entre los cuerpos
y solo espera ver un poco de televisión.
Después de saludar a la familia,
por fin se echa en el sillón,
pronto van a estar los fideos,
En la televisión está el noticiero,
con la mano toma el control.
La verdad, no le importa el atentado;
él solo quiere reírse con cualquier reality show.

EXCRITURA DE MARK ALEXANDER BOYD

Siempre de fantasía en fantasía,
en mi bosque;
esa hoja que cae
en el viento de la historia.

Aun soy un niño malcriado
o una mirada,
el otro de una mujer
en la piel de una pasión.

A veces, olvido la desdicha;
ando por ahí,
invento algunos versos
para creer el engaño de la felicidad.
EXCRITURA DE CUMMINGS

Solo necesitaba ese ,
la inmensidad de la piel.

Pero ni una abeja
entre el  perfume de las rosas.

Un sendero abierto,
esa misterio hacia el bosque.

Tampoco en tu poema,
mi preferido, entre paréntesis.

Jardín o libro,
no asoma ningún milagrito.

Apenas veo una palabra
tan lejos del deseo, un no.
EXCRITURA DE LA FILOSOFÍA BARATA

Tan breve,
y a veces es demasiado lenta.
o casi peor
que la mariposa y la muerte,
esa trillada metáfora;
quién sabe,
a la vida siempre la vive otro
y sus palabras,
claro no sabemos su nombre,
sus respuestas
siempre inútiles, desesperadas
como el sol.
Pero otra vez  empieza el día:
abro la ventana.
EXCRITURA DE GIRONDO

En esa única médula
lo más:
el ser.
O no. A penas
jueguitos,
terribles,
gratuitos.
Así es esta vida:
el lodo
y la pava.
Cualquier otra lengua.
EXCRITURA (O PLAGIO) DE NIETZSCHE

El hombre se miente toda la vida,
como en la noche con los sueños.

El hombre descansa sobre el abismo,
como si durmiera sobre una nube.

El hombre juega, canta y baila
como si realmente festejara la vida.

Así impone el dominio al mundo
y solo posee las metáforas de su miedo,


¡SOMOS UNOS APARATOS!

Todos saben que existen aparatitos para todo,
lo que sea, y cada día son más...
Cómodos, veloces, increíbles, ¿reales?
Para colmo, casi siempre funcionan a la perfección
o, sin pensar, se los tira a la basura y listo.
Además, lo reconozco, los uso; imposible vivir sin ellos.
Ante la duda, rápido, se aprieta un botón.
Sin embargo, sé que Rimbaud es más moderno:
solo mediante la revelación podemos ser humanos.
Claro que es ridículo, todos lo saben,
pronto, muy pronto -¿o ya?-  solo seremos aparatitos.

domingo, 1 de enero de 2017

EXCRITURA DE NIETZSCHE

Ese maldito instante,
el más orgullos, el más tramposo
y sin retorno, eterno.

Después no hubo,
jamás se podrá respirar sin control:
el conocer fue la condena.

Tan lamentable
que ni siquiera un mosquito, nadie, 
aun logró escapar.

Por supuesto, 
todos padecen las consecuencias...
Ay, ese invento fatal.

Claro que poco importa,
el conocimiento ya nos desconoce,
olvidó ese instante y la vida.
EXCRITURA DEL DANTE

Supongamos que en estos tiempos,
los cincuenta, más o menos, son la mitad de la vida.

Y algo, que no vi aparecer, se apareció
y ya no supe; y después, por supuesto, el infierno.

O si querés, apenas un pequeño esfuerzo,
solo leer algunos titulares, la tele...es demasiado.

Si no te jode, como se anda un poco solo,
me gustaría que fueras mi guía, o al menos conversar.

Te aclaro, entre otras preferencias,
no me interesa el purgatorio y ni hablar del paraíso.

Ahora, te explico, se dice todo bien,
que en realidad significa que a nadie le importa nada.

También se puede salir a pasear, por ahí,
al menos un rato hasta lograr perderse bien adentro.

Lo sé, siempre pedí estupideces,
pero me conformo con los fantasmas de algunas voces.

Vos no tenés que escribir nada,
simplemente estar, hasta te prometo pagar los tragos.

La verdad, inútiles son las esperanzas,
igual consuela tu Beatriz, aunque otra vez ya cortaron la Luz.
EXCRITURA DE CHANDLER

No era nada más que una despedida.
Así que bebió otro trago
y empezó el sabor del olvido.
Inútil mirar, ¿para qué?
Apenas el ruido de los pasos por el corredor,
cada vez más leves
hasta que reinó el silencio.
Sin embargo, siguió escuchando...
Solo era un adiós triste, solitario y final.

EXCRITURA DE RAYMOND CARVER

A la lapicera que solo contaba la verdad,
sin darse cuenta, por un bolsillo,
la tiraron adentro del loco lavarropas.
A pesar de que la pude rescatar...ya no,
le dolía demasiado el ojito de la pluma.
Lástima, tantas ideas, frases, poemas;
todo se perdió entre la maldita espuma.
Me acuerdo, un día de otoño había escrito:
"La luz de luna moja los campos del alma".
Así que le dejé en el escritorio, siempre,
y a veces, ¡qué tonto!, vuelvo a intentar
sobre cualquier hoja, lo que sea, una palabra.
Pero es inútil, y además me duele la mano.
Pobre lapicera.. habrá que resignarse
y con suerte, de a poco, olvidar la verdad.
CASI UN EXCRITURA DE LARRY LEVIS

Es posible que sea una ventana
y un árbol.

Pero no tengo ninguna certeza,
apenas miedo.

Es posible que sea la vieja luna
y aquella luz.

Pero no confío en tanta distancia,
mi ausencia.

Solo me tranquiliza otro cigarrillo,
ser este humo.