EXCRITURA DE LEÓNIDAS ESCUDERO
En defensa de mi jardín:
matar las hormigas.
Encima el pie, y pocas
logran escapar.
Son víctimas, pobrecitas,
ellas no saben.
Pero a veces yo también
soy hormiga.
Aunque admire las rosas,
tampoco entiendo.
Y ese misterioso pie, fatal,
ya acerca su sombra.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario