domingo, 5 de agosto de 2018


VIDA DE NYLON

Todo está rigurosamente controlado en el pabellón,
más aun cuando sale algún interno;
no importa su nombre,
su conducta, su antigüedad,
tampoco su patología.
Al volver se revisa, siempre,
hasta la última prenda,
esa zapatilla rota,
los dobladillos del vaquero;
cada paquete, cadenitas
ni siquiera un cigarro...
Pero ¿una simple bolsita de nylon?;
apenas unos minutos, bien apretada, lo asfixió a Raúl.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario