viernes, 22 de abril de 2022

RÍO INMÓVIL



 Solo tengo la espera indiferente del tiempo,

una parodia burlesca del vacío.

Ya todos los días son el mismo día.

quisiera esconderme del mundo,

que se borren las muecas de mi cara.

Ni siquiera encuentro la voz de los lamentos,

tampoco esa botella para tirar al mar.

el aire se confunde con la derrota,

con las preguntas que rompen las almas.

A veces cuento los azulejos de la cocina,

ellos tienen su lugar exacto;

algunas pequeñas marcas de vida

la prolijidad del sin sentido..

Pero eso no sirve, es otro engaño.

Lo mismo pasa con este poema

que se perderá en el tacho de basura,

otro intento fallido para ver una palabra verdadera.

A mí me acompañan los temblores,

la confusión de las imagenes, 

la razón estúpida de ser todavía un humano.

Todos mis deseos cayeron en un pozo sin fondo,

ya no puedo comprender a los pájaros,

tampoco preparar unos buenos mates

o adivinar los secretos del humo del cigarrillo.

Quizas perdi la apuesta de Pascal,

cada latido es un llamado de la tristeza,

una pesadilla ciega y muda, 

aunque eso en realida no importa 

mi espíritu me robo hasta el nombre.

sin aviso me dejó lejos de cualquier horizonte.

si al menos pudiera encontrar hallar un final para este poema...

Al atardecer le agrada anticipar los dolores de la noche,

por suerte no tengo que combatir con mi sombra,

en mis entreñas se agita la muerte de mi muerte,

la fachada del ser deviene en un río inmovil..



.


 



No hay comentarios.:

Publicar un comentario